Amo la fotografía espontanea, amo lograr algo maravilloso en el momento, improvisar y sobretodo confiar en mis instintos me han traído resultados que me encantan en mis fotografías. Esta serie de fotos no es la excepción.
Los momentos mas bellos que he pasado con Karen han sido espontáneos, no planeábamos mucho mas allá de un lugar de encuentro, mi casa normalmente lo era. En esta ocasión nos vimos al finalizar la tarde, ella estaba feliz de haber concluido una parte de un trabajo que la tenía estresada y de que tenía un recién corte de pelo el cual le encantó. Me dijo que llevaba varios intentos fallidos de selfies y no sabía como tomarse una buena. Lo primero que le dije fue que hiciéramos fotos, se que le podía tomar fotos que quedarían mejores que una selfie. Además era la perfecta ocasión para volver a tomar fotos ya que venía estando desmotivado por varias semanas. Me emocioné.
Después de llegar a mi casa y conversar un rato, empecé a buscar espacios donde fotografiar. Luego de tomar bastantes fotos variando la estética y los conceptos como si fuese un calentamiento previo a la hora de un gran juego, le dije a Karen que encendiéramos las luces en el salón de fiesta. En mi mente tenía los fotogramas de unas escenas de fiesta y baile de "Una Mujer Fantástica" de Sebastian Lelio, película que había visto recientemente la cual me encantó. Sabía exactamente que canción poner para establecer el tono y atmósfera que quería, Old Skool de Metronomy, cuando la escucho solo pienso en bailar. En cuanto a direcciones, ¿Qué hago? pregunta Karen, se tú le respondo.
Todas las fotos fueron tomadas con la cámara del Samsung Galaxy S5 + 16 MP
Estaba encantado con las hermosas luces de colores que llenaban el lugar. Se me iban ocurriendo ideas y esas ideas llevaban a otras ideas. Al final Karen solo bailaba, contemplar todos esos momentos me hacían sentir como si estuviese en una película, tal como la de Lelio que me gustó tanto, pero esta vez nosotros eramos los protagonistas y los directores. Nos detuvimos en un momento para ver las fotos y estaba feliz. Feliz por todo. Por el presente, por las fotos, por tener a Karen, por crear con lo poco y utilizar lo que se tiene al máximo. ¿No te parece bellísimo el acto de crear? ¿Verdad que se siente bien? le dije a Karen. La recuerdo un poco sorprendida y feliz.
Aunque a ella no le gustó cómo salió en algunas fotos, yo pienso lo contrario, lo que hacen mas llamativas y únicas estas fotos es ella, su estilo, su energía, su esencia, cosa que no hubiese logrado con otra persona, por lo cual pienso que sin duda alguna sale muy bien en ellas.
A pesar de que los días siguientes volví a tener bajones emocionales, donde no me hallaba en nada y me carcomía la desdicha, este fue uno de los días que más resaltó en esas semanas de inquietud. Me divertí mucho. Días como esos son los que me motivan a seguir creando, a experimentar, a salirme de mi zona de confort, y no dejar morir nunca esto tan hermoso que he descubierto como lo es la fotografía.