A veces las imágenes funcionan con otras, hablan entre ellas, creando una conversación dinámica. Crean en algunas ocasiones ese lenguaje invisible, haciendo que el espectador recorra cada una de las imágenes en conjunto, logrando que las vea en concurrencia, mirándolas una y otra vez, buscando hilos conductores, como un río.
Otras veces funcionan como un lenguaje obligatorio, como si discutieran entre ellas.
Además si jugamos con lineas diagonales que caen de forma abrupta entre una y otra imagen, crea la ilusión de discordia visual, aunque sea el mismo elemento o color el vínculo entre ellas.
En este tríptico el color y las líneas, llevan al espectador a salir de las imágenes, visualmente, y entrar de nuevo en ellas, haciendo cortes drásticos entre una imagen y otra.
Lo importante es que sean visualmente agradables entre cada fotograma. Quizás sólo el autor de la obra quiera que el espectador entre y salga de la imagen una y otra vez, o quizás pretenda que éste pasee con la mirada de una forma sublime, suave.
Todas las imágenes son de mi autoría.
Moto G 3ra generación. @inedido
¡Muchas gracias por leer y ver!