Las crónicas de Esther (I).
De no haber encontrado a mis dos hermanos muertos en el cuarto de al lado, hubiera pensado que ellos la habían matado. El ritual de cruzado obviamente roto; puertas, ventanas y techo intacto. De haberla encontrado sola, habría pensado… causa natural. Su rostro mostraba la pacífica expresión de quien ha vivido en virtud y sacrificio sabiéndose recompensada renunciando a este mundo. No así la expresión de mis hermanos. Sus tétricas miradas, sus cuerpos retratando un rigor mortis de tortura y dolor y sus carnes secas, dejaban pocas dudas de una visita maligna.
Le dije a Aquiles que llamara a la funeraria. Me senté en la cama a su lado y vi que tenía cerca la grabadora que le había regalado hacía varios años. Le había dicho que aprovechara cuando su comadre viniera a visitarla y se grabara. Así la entretenía con las historias que la desvelaban y me dejaba esos recuerdos. Había un casete dentro. Lo rebobiné. Presioné play.
…(Ruido) Todo lo que pasó en la casa era pa’ mí; lo agarraba eran los muchachos: Luisa, Carmen, Fredi y José. Por poco me mataron mis 4 hijos. Y todo eran dos vecinos; los de al la’o y otra que tenía más allaíta. Ahora, yo le serví a esa gente lo que usted no se imagina ¿oyó? Los del la’o, se fue la muje’ enferma pa’ …. Dejó tres muchachitos ... No le dejaron ni siquiera orden en una bodega pa’ que le dieran de come’…. Yo era que le daba rial pa’ que llevaran pa’ su escuela. Si necesitaban compra’ algo, una libreta, … yo le daba ... pa’ que …, (ellos mismos lavaban su ropa), le daba jabón, ace. Bueno, … y su comi’a: .... y ve con que me pagaron.
Me tuvieron años mal. … aquí no se compraba más nada, sino pura vaina de remedio.... No’otro’ tuvimo’ a un pasito de pedi' limorna ¿Oyó?... Luisa ‘tuvo años loca. Menos mal que se fueron, ella y Carmen. Casualidad Luisa se casó con un muchacho del Pilar (es lo único que …agradece’le a Aquiles). Por él, conseguimo’ una gente de Trenida’. Él trabajaba en una panadería y los dueños eran trinitario’. Y ‘tando ellos viviendo allá, a Luisa le dio la loquera. La señora tenía un viaje pa’ Trenida’ y entonces dijo, voy a consulta’ mi gente. Consultó y nos salió tooodo lo que estabamo’ viviendo… y entonces me mandaron a adverti’ que tuviera cuida’o con Carmen. Y entonces iban a curar a Luisa, pero… si la curaban no podía veni’ MÁS NUNCA a Yaguaraparo. ... Y entonces … vamos a cura’ esa gente... jode’ esos vecinos... es una marda’ que le han hecho, que vaya a perde’ sus hijos.
Entonces vinieron... Mandé rapidito, señora, echa’ to’ ese fondo ‘e tapia, enbloca’o. … porque ellos estaban pendiente …. me miraban a mí de todo. Esa gente sabía a qué hora prendía un bombillo de noche; a qué hora me tiraba un peo. A veces que Sanchez llegaba de madruga’, cuando estaba de comisión, el otro día to’ el mundo sabía a qué hora llegaba …. Me tenían chequia’ita… Porque entonces brincaba la cerquita del frente que era … madera, pintaíta, bien bonita y la brincaba y pasaba a echa’ vaina… La vieja, sí.
…
Una vej vino como pájaro. Esa casa hacía como que ‘taban arzando el zin’. Después se escuchaba como que estaban caminando. Después aaaahhh, arañando. Aaaahhh, aaaahhh. Me persigné y empecé a reza’. Se quedó calla’.
…
...¿El viejo? Ese tenía to’a las mañas, ¿Oyó? Se volvía sapo, se volvía culebra, se volvía murciélago, se volvía PEEERRO. Alberto Faría’ lo vio vuelto perro una vej, y lo siguió. El veía que pasaba to’as las noches un perro grande, pelu’o…un perro artote. Una noche … lo siguió. Cuando el perro llegó ahí al alambre frente 'e Benito, el perro pasó el alambre y cuando salió ‘el la’o allá … Benito!
…
… Bueno, y había un entierro en el fondo ‘e la casa...
(VOCES INDISTINTAS) … No te morijte… Fui'te máj arrecho que los trinitario’.
…
En ese momento sentí algo frio y viscoso rozando mi pie. El escalofrió que recorrió mi cuerpo reventó en mis manos, haciendo caer la grabadora, y en mi garganta, liberando un grito de espanto. El asqueroso animal apresuró sus saltos hacia la puerta.
¡AQUILES!, le grite a mi esposo. CIERRA LA PUERTA. No dejes salir ese sapo!
Este relato está inspirado en las incontables historias--oídas y vividas--sobre eventos sobrenaturales que involucraban algunas de las leyendas más atterradoras de nuestro folklore: brujas, magia negra y seres antropomórficos capaces de transformarse en toda clase de animales. Ligadas con las supersticiones derivadas de nuestro sincretismo religioso, estas leyendas tomaron diferentes formas en diferentes regiones de Venezuela. En el caso concreto de mi pueblo natal, Yaguaraparo (al este del estado Sucre), las historias de brujas capaces de transformarse en aves de diferentes especies eran muy comunes; menos comunes pero igualmente espeluznantes eran las historias de hombres capaces de transformarse en perros o tigres (El tigre de Palenque siendo el más famoso) por medio de oraciones o ritos satánicos.
Gracias por leer y comentar
Y gracias a @marlyncabrera por ese maravilloso concurso que nos ha permitido explorar este lado maravilloso de la cultura latinoamericana. Pueden ver las bases del concurso aqui: @marlyncabrera/cuentos-para-asustarte-1er-concurso-de-relatos-inspirados-en-mitos-y-leyendas-latinoamericanas
