No es ninguna sorpresa que existe un gran éxodo de venezolanos que salen de su país es busca de mejores días huyendo de una crisis humanitaria de proporciones causada por el nefasto socialismo del siglo XXI –iniciado por Hugo Chávez Frías– que como una plaga de dimensiones bíblicas ha devastado considerablemente a Venezuela y, en menor medida, a otros países de la región. Por el bien de los latinoamericanos no veo el día en que esta pesadilla termine.
Imagen: Pixabay
El problema es tan grave que se prevé que después de Siria, la próxima crisis de refugiados ocurrirá en Venezuela. En realidad considero que ya ocurre, pero la comunidad internacional se hace de la vista gorda. Se calcula que, desde hace 20 años, han salido de su país cuatro millones de venezolanos. Para entender la magnitud de este fenómeno, vamos a compararlo con lo que ha ocurrido en Siria, se estima que cinco millones y medio de sirios han huido del horror de la guerra civil en su país.
Los países cercanos a Venezuela no son ajenos a esta desgracia. Cada uno de los países que conforman la región andina han adoptado políticas diferentes en cuanto al manejo de esta compleja situación.
El gobierno colombiano, por ejemplo, ha adoptado una política migratoria específica para los venezolanos en la que ha otorgado un permiso temporal de residencia y trabajo a 150 mil de los 750 mil ciudadanos de ese país que viven en Colombia, en realidad, se calcula que son dos millones.
La política migratoria más amigable ha sido la que ha tomado el gobierno peruano el cual creó un permiso renovable anualmente de trabajo y residencia cuyo costo es de 12 dólares.
Imagen: Pixabay.com
En Ecuador, según datos de la Subsecretaría de Migración del Ministerio del Interior, el 21 % de los venezolanos que ingresaron al país no salió, esto quiere decir que se quedaron en Ecuador 61.138 venezolanos, 12 veces más que en 2015. La gran mayoría de ellos ingresa al país por la frontera entre Ecuador y Colombia. Las oficinas migratorias reciben tres mil solicitudes diarias.
El 85 % de los extranjeros que ingresan por la frontera norte son venezolanos.
Resulta más complicado para los venezolanos permanecer en territorio ecuatoriano. Prevalece la absurda y retrógrada idea de que ellos han llegado a Ecuador para "robarse" el empleo que pudieran tener los ecuatorianos. Se desconoce que los migrantes vienen a trabajar para superarse y mejorar sus condiciones de vida. No es un juego de ganadores y perdedores, ya que con el trabajo de las personas –sin importar su nacionalidad– se crea riqueza y, la sociedad en su conjunto, se beneficia de ella. Los países más prósperos han sido los que a través de la historia han abierto las puertas a los ciudadanos de todos los orígenes.
Imagen: Pixabay.com
Esa estúpida idea nacionalista que considera que tengo más derechos que tú en un determinado pedazo de tierra porque yo llegué primero es una de las grandes taras que debemos superar los latinoamericanos especialmente. El concepto de nacionalidad es completamente anacrónico en un mundo que está dejando atrás la era industrial para dar cabida a la era de la información. Las jurisdicciones están destinadas a la desaparición, al menos ese es mi anhelo si es que pretendemos que la humanidad tenga futuro.
No somos venezolanos, colombianos, peruanos, ecuatorianos, somos ciudadanos del mundo.
La visa de trabajo más barata a la que se puede acceder en Ecuador es la de Unasur que tiene un valor de 250 dólares. Los que no logran obtener un permiso laboral legal trabajan en el sector "informal" donde se los trata como delincuentes, según palabras de algunos venezolanos migrantes. Antes de obtener el permiso de trabajo, los provenientes de Venezuela que llegan a territorio ecuatoriano ingresan en calidad de turistas con un permiso de permanencia de 90 días.
Imagen: Pixabay.com
El gobierno ecuatoriano –a todas luces afín al régimen de Nicolás Maduro– si en verdad se interesaría por el bienestar de los venezolanos que han dejado atrás a su país y a sus seres queridos debido a la situación precaria en la que viven en Venezuela, debería establecer un régimen especial que conceda a los venezolanos un permiso temporal renovable de residencia y trabajo.
Según cifras del Banco Central del Ecuador (BCE), el 95 % de la inversión extranjera directa (IED) proviene de Venezuela, es decir, corresponde a inversiones en los sectores de comercio y manufactura en una escala de micro a pequeña.
Este gesto de buena voluntad significaría de gran ayuda para los venezolanos que llegan a Ecuador y, del mismo modo, se conseguiría regularizar la estadía de muchos que permanecen en la ilegalidad siendo víctimas de abusos tanto de parte de las autoridades como de los ciudadanos comunes y corrientes.
Por Juan Francisco Bolaños
@juanfb
Lecturas que vas a disfrutar
Una selección de mis mejores artículos publicados en Steemit.com:
Tu apoyo hará realidad un sueño
Tus donaciones serán utilizadas para financiar la publicación de un libro digital e impreso que recopilará los artículos que he publicado en mi blog de Steemit.com. ¡Gracias de antemano!
BTC: 19wyKAFfbJMBfizFyQCxCYEdYUDWeAPYo1
ETH: 0xe0722b3DE8Da45294477b7DC08BD7a078F7850dC
DASH: XbDcvPZf7ZUGbYKLLrS19whaehoMSFiN3M
LTC: LPi2EH4jhs6Aj7P74xPXYNnCvQNMGkUQQZ
Únete a Busy.org
Esta publicación fue escrita en Busy.org, plataforma alternativa a Steemit.com que es más amigable con el usuario y tiene muchas más funcionalidades. No necesitas crear una cuenta nueva, usas las mismas credenciales de Steemit.com.
¡Nos vemos en Busy.org!