Al otro lado del planeta

Sol da la vuelta
y busca la otra mitad
del corazón al lado
contrario del planeta,
pido ir con premura
y palabras cargadas de ternura
majestuosidad y belleza.

Te encargo un alba
de cálida magia y pureza,
la sutileza vestida
de plumas de garza
y mirra de la buena
y cuando roces su piel
y su espalda sienta
que son mis palmas
ilusionadas por ella.

Sol andá y toca su puerta,
dile a la luna
que no te reprenda
por llevarle contigo
mis pétalos de rosas
que cultivo para ella
con dedicación y entrega.

Y cuando estés de frente
vístase usted de valiente
y al oído convencele
con prosas de Neruda
y sonrisa reluciente
entregale el pecho
con todo y sin nada
de pendientes.

Sol dígale que en mi
tiene un pretendiente
y un futuro que espera
por ella impaciente
para dar el paso
definitivo y consciente.